Estrés: cuando lo que pasa en la mente se manifiesta en el cuerpo

El estrés crónico se ha convertido en un enemigo silencioso que desgasta la salud de las personas desde adentro hacia afuera. Expertos médicos y de salud pública han identificado el estrés como un culpable importante en la disminución de la esperanza de vida, especialmente entre aquellos que luchan contra enfermedades crónicas. Las condiciones económicas, sociales y políticas han creado una sociedad desigual que impulsa a las personas a envejecer más rápidamente, enfermarse más y morir a una edad temprana.

El estrés afecta a los adultos de múltiples maneras, y una encuesta revela que la inflación, la violencia, la política y las relaciones raciales son algunas de las fuentes de estrés que escapan al control de las personas. La falta de ingresos y ahorros adecuados también es un desencadenante significativo de estrés financiero. Elizabeth H. Bradley, presidenta de Vassar College, argumenta que la sociedad y su desigualdad son factores críticos que determinan los niveles de estrés y, por lo tanto, la salud en general. Este fenómeno ha dado lugar a la denominada “Hipótesis de la Meteorización”.

Durante la infancia y la adolescencia, puede provocar problemas de salud física y mental

La meteorización es un proceso en el que el estrés crónico desencadena una respuesta fisiológica en el cuerpo, provocando cambios que resultan en un envejecimiento prematuro y la aparición de enfermedades crónicas. La respuesta de lucha o huida, que involucra hormonas como el cortisol y la epinefrina, se activa repetidamente, lo que aumenta la presión arterial, los niveles de glucosa y la inflamación en el cuerpo. A medida que el tiempo avanza, este ciclo constante causa daños en el organismo.

LE PUEDE INTERESAR

Vacunas: los inoculantes antigripales tendrían efectos positivos contra el Alzheimer

LE PUEDE INTERESAR

La luz diaria: el reloj que mide los beneficios de una cuidada exposición al sol

Este proceso de meteorización comienza en el útero, ya que el estrés materno afecta a los fetos y puede dar lugar a nacimientos prematuros y bajo peso al nacer. Durante la infancia y la adolescencia, el estrés crónico puede provocar problemas de salud física y mental, como obesidad y depresión. A nivel celular, los telómeros, las estructuras que protegen los cromosomas, se acortan más rápidamente en personas con niveles elevados de estrés crónico, lo que acelera el envejecimiento.

La carga alostática, el impacto acumulativo del estrés en la salud, afecta de manera desproporcionada a las poblaciones marginadas, como los negros y los inmigrantes. Los afroamericanos experimentan enfermedades como hipertensión y diabetes antes que los blancos. La carga alostática también se asocia con complicaciones en cirugías y una variedad de trastornos metabólicos.

La meteorización subraya la necesidad de abordar la desigualdad social como una de las principales causas del estrés crónico y sus consecuencias para la salud. Para lograr un cambio significativo, se requiere una comprensión más profunda y una acción social que aborde las raíces de la desigualdad y el estrés en la sociedad. La meteorización no es solo un término vago; es un concepto complejo que impulsa el esfuerzo constante por superar las barreras de la desigualdad, lo que finalmente socava la salud de las personas y las expone a un mayor riesgo de enfermedades crónicas y muerte prematura.

UNA SOLUCIÓN EN LA ALIMENTACIÓN

La dieta mediterránea se destaca como una estrategia efectiva para aliviar y prevenir los síntomas del trastorno de estrés postraumático, según investigadores de la Universidad de Harvard. Considerando la influencia del microbioma intestinal en las emociones y la respuesta al estrés, se ha identificado una sólida relación entre la alimentación y esta afección. La dieta mediterránea, basada en la tradición culinaria de regiones como Grecia e Italia, promueve la ingesta de alimentos como vegetales, frutas, cereales integrales, nueces, legumbres y aceite de oliva, destacando este último como una fuente principal de grasas saludables. También se sugiere el consumo moderado de queso y yogur, mientras se recomienda reducir la ingesta de carnes rojas y procesadas, que se asocian con los síntomas del estrés postraumático.

El estrés postraumático, que puede desencadenarse por eventos traumáticos como la pérdida de un ser querido, conlleva una serie de síntomas y trastornos que afectan tanto a hombres como a mujeres. Además de sus efectos en la salud mental, se ha demostrado que el estrés postraumático puede dar lugar a enfermedades crónicas, como enfermedades cardíacas, accidentes cerebrovasculares, diabetes y trastornos autoinmunitarios, lo que puede provocar una muerte prematura. En este contexto, la dieta mediterránea se presenta como una opción eficaz para abordar los síntomas y efectos del estrés postraumático, alentando a las personas a adoptar un enfoque de alimentación saludable y basado en plantas para mejorar tanto su bienestar mental como físico.

UNA TÉCNICA EFICAZ

El estrés es una tensión física o emocional que puede dañar la salud a largo plazo. El Dr. Andrew Huberman, neurocientífico de la Universidad de Stanford, desarrolló una técnica de respiración de 16 segundos para reducir el estrés. Un estudio demostró que esta técnica mejora el ánimo y reduce la excitación fisiológica.

La desigualdad social se destacó como una de las principales causas del estrés crónico

La técnica es versátil y se puede realizar en cualquier lugar. Se enfoca en controlar conscientemente la respiración, lo que ayuda a calmar el sistema nervioso. La respiración consciente durante al menos cinco minutos al día mejora el estado de ánimo, reduce la ansiedad y disminuye la frecuencia respiratoria. Además, esta técnica beneficia a asmáticos y supera la meditación en atención plena en el aumento del ánimo.

La técnica consiste en inhalar durante cuatro segundos, contener la respiración otros cuatro segundos y exhalar durante el mismo tiempo. Para contar los segundos, se sugiere usar una palabra de cuatro sílabas o una frase. Prolongar la práctica durante varios minutos y convertirla en un hábito ayuda a reducir el estrés y la ansiedad al oxigenar el cuerpo.

El estrés crónico se ha convertido en un enemigo silencioso / Pexels