Un hombre abrió fuego en una distribuidora de alimentos de Ensenada: no hubo heridos

“Las balas me pasaron por al lado, por arriba de la cabeza”, le contó a su abogado el dueño de una distribuidora de Ensenada donde ayer a la tarde irrumpió un sujeto que los amenazó a él y a su hermana antes de abrir fuego, informaron distintas fuentes. El acusado fue interceptado por la policía en plena fuga, con un arma y munición gruesa.

El incidente sucedió alrededor de la 1 de la tarde en una distribuidora de alimentos que funciona en Eva Perón y Barragán, de Ensenada, a donde se presentó un hombre de 61 años “que amenazó a una de las dueñas diciéndole que iba a matar a sus hermanos”, dijo Miguel Molina, representante legal de la familia. Según dijo, en ese momento apareció uno de los hermanos, de 28 años, a quien el acusado -de 61 y empresario del transporte- “le apuntó y disparó”.

Ileso -por buena fortuna o mala puntería del tirador-, el comerciante atinó primero a arrojarse al piso, pero apenas cayó en la cuenta de que el otro podía ir a buscarlo, escapó por una ventana. “El depósito tiene dos entradas”, describió Molina, antes de explicar que el agresor fue a sorprenderlo “por el acceso de la esquina, por lo cual regresó a la oficina” y volvieron a escucharse más disparos.

Mientras tanto, la hermana a la que había encarado primero llamó al 911, de modo que el atacante decidió escapar en el Volkswagen Gol blanco en el que había llegado, informó la policía en su reporte.

Los móviles del Comando de Ensenada salieron a buscarlo con la descripción que aportaron los testigos, logrando interceptarlo en Juan Perón y Bossinga. El sujeto no resistió el procedimiento. En el coche encontraron tres cartuchos 12/70 posta de guerra; otros cuatro del mismo calibre, posta de goma; 46 proyectiles 22 largo y punta hueca; un cinturón catana con 15 cartuchos calibre 16 (de guerra), una pistola marca Bersa calibre 22 largo con 6 proyectiles en el cargador y uno en la recámara, además de un cuchillo, detallaron los voceros.

Lo llevaron a la comisaría Primera de esa ciudad por “daño, abuso de armas, amenazas agravadas y tenencia ilegal de arma de uso civil”, pero Molina pedirá que lo recaratulen “tentativa de homicidio”.

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“Se conocen, trabajaron juntos, pero nunca tuvieron problemas”, aseguró el abogado.