Estimado lector, muchas gracias por su interés en nuestras notas. Hemos incorporado el registro con el objetivo de mejorar la información que le brindamos de acuerdo a sus intereses. Para más información haga clic aquí

Enviar Sugerencia
Conectarse a través de Whatsapp
Temas del día:
Buscar
Toda la semana |LA MODA SE ADAPTA

Protección con onda: los barbijos ya son un accesorio fashion

Los tapabocas llegaron para quedarse y es por eso que los diseñadores locales los confeccionan con distintos modelos y estilos para que de gusto usarlos

Protección con onda: los barbijos ya son un accesorio fashion

Diseños con telas africanas. Un shock de color para el invierno

31 de Mayo de 2020 | 08:31
Edición impresa

Si en un principio no estaba recomendado su uso, ahora parece que, más allá de la obligatoriedad de llevarlo en la vía pública, el barbijo se convirtió en una prenda más que se instaló en nuestras visas.

Es por eso que si durante los primeros días no importaba mucho lo lindo o feos que fueran, ahora el estilo y diseño del tapabocas cobró otra importancia. Claro que en esto de hacer moda con el barbijo no es algo nuevo. Desde hace unos meses reconocidas marcas fashion ya están vendiendo sus modelos sofisticados, pero además, en Asia este accesorio lleva más de 50 años usándose y allí se pueden encontrar los modelos más variados y originales.

Barbijos, mascarillas o tapabocas son parte de su rutina desde hace años en Corea o Japón, por ejemplo. Es muy difícil caminar por sus calles y no cruzarse con alguien que los lleve puestos.

En Asia, la costumbre de utilizar máscaras o barbijos comenzó en Japón a principio del siglo XX, en 1918 cuando una pandemia de gripe mató a millones de personas. Cubrirse las caras para protegerse se convirtió en una costumbre.

Con tiempo, las máscaras comenzaron a hacerse más populares para protegerse de las cenizas tras grandes terremotos como el de 1923. Luego pasaron a utilizarse sobre todo en temporadas invernales para combatir enfermedades como resfríos y gripe. En estos lugares el bien común prevalece y ponerse un barbijo no es para no contagiarse sino para no contagiar a los otros.

Volviendo a estos pagos, donde recién comienzan a surgir los primeros barbijos de diseño, son varias las marcas o emprendimientos textiles que los están ofreciendo.

“La iniciativa de los tapabocas surgió por la necesidad de reactivar la situación económica del emprendimiento y de quienes trabajan y colaboran para Namaisha”, cuenta Camila Correa, pionera de la marca y agrega: “si bien usar tapabocas surge de un momento de necesidad, no significa que no puedan acompañar, estilo, diseño, onda, color. Hace más de dos años que me dedico a importar telas africanas, de países como Kenia, Guinea, Uganda, que las vendemos como piezas y además confeccionamos distintos productos apostando a la mano de obra nacional”.

Para Camila, hacer tapabocas es una forma de subsistencia que tienen las emprendedoras del rubro textil: “esta pandemia también perjudica a los emprendedores, a quienes trabajan en talleres de costura y gente que tiene locales y vende nuestros productos. Frente a esta situación decidimos re inventarnos con la confección de tapabocas de diseño. Los hacemos con tela exclusiva, única, de calidad, con trabajo de diseño anatómico y reutilizables porque se lavan y se pueden volver a usar. Realizamos una primer producción y se agotaron y esto nos dio la pauta que hay gente que ya lo incorporó como accesorio”.

Son un nuevo “accesorio” para el rostro, que tendremos que usar por un tiempo. Las telas africanas únicas por sus colores y patrones le ponen onda y color a esta circunstancia.

“Es un nuevo accesorio para el rostro, que tendremos que usar por un tiempo”

 

“Empecé a hacer barbijos el fin de semana anterior a Semana Santa, cuando todavía no era obligatorio. Los iba a armar con una friselina finita que tenía para donarlos, pero al ver que no recibían de esa calidad en los hospitales, me puse a armarlos con telas que tenía en el taller de colecciones anteriores. Pero apenas los promocioné me los sacaron de las manos”, cuenta Brenda Wlasiuk, diseñadora de la marca Namibia que en menos de dos meses confeccionó 1.200 tapabocas para sus clientas.

“Fue una forma de salir a flote con la marca porque las fábricas de telas estaban cerradas, no se podía vender nada y empecé a probar. Fue prueba y error como tres veces hasta que terminé armando dos modelos: uno al que se le puede colocar una protección y otro más rígido”, dice Brenda sobre sus barbijos que tienen, obviamente, al impronta de su marca: telas suaves, coloridas y a la moda.

Para esta diseñadora, “la idea es que la gente se sienta protegida pero que esté contenta con lo que se pone en la cara, que el barbijo sea un complemento alegre. Las mujeres buscan llevar diseños lindos y queremos ofrecer ese producto”.

Varias marcas de indumentaria de lujo de Europa han lanzado sus tapabocas de ediciones limitadas y diseños exclusivos. Eso indica que la industria de la moda vio en este accesorio un nicho de producción y comercialización fructífero.

Pero en este mundo donde por ahora el comercio internacional es muy limitado, son los diseñadores locales quienes apuestan a poder abastecer la demanda de barbijos cumpliendo los requisitos básicos de protección y jugando con el arte de crear con telas, eso que tan bien saben hacer.

INCLUSIVOS

Claro que no todo se limita a lo lindo y fashion. Según datos de la Organización Mundial de la Salud, 466 millones de personas en todo el mundo padecen pérdida de audición discapacitante, de las cuales 34 millones son niños. Si bien en la actualidad existen diversas soluciones para tratar esta patología, es importante que quienes se ven afectados por ella puedan comunicarse y desenvolverse en la vida cotidiana.

Los barbijos inclusivos dejan al descubierto la boca para que se puedan leer los labios

 

Y en este sentido, el barbijo o tapabocas convencional genera distorsiones y disminuye la voz del que habla, dificultando la comprensión de lo que se está diciendo aún a quienes gozan de una buena audición. “Por otro lado, al cubrir la boca, el apoyo visual desaparece, generando un doble aislamiento en aquellas personas padecen hipoacusia y aún no pudieron comenzar ningún tratamiento”, explica la licenciada María Laura Carral, directora del departamento clínico de MED-EL.

Al uso obligatorio de barbijo también se suma la falta de consciencia y el desconocimiento que existe sobre los medios y herramientas que pueden favorecer la comunicación entre personas hipoacúsicas y normoyentes.

Para que esta medida de prevención no se transforme en una barrera más, activistas y organizaciones que luchan por los derechos de las personas con hipoacusia incentivaron el uso generalizado de máscaras faciales o barbijos transparentes que dejan al descubierto la boca, resaltando la importancia de su uso en todos los servicios considerados esenciales, como, por ejemplo, agentes de policía, cajeros de supermercados y personal de la salud.

“El uso de tapabocas transparente es importante porque posibilita la comunicación de las personas que sufren pérdida auditiva. Se trata de una opción que debería ser utilizada por todos, ya que, además de prevenirnos del contagio, también incluye a la comunidad hipoacúsica, facilitando el desarrollo de sus actividades”, plantea Carral.

Como accesorio fashion o respondiendo a las necesidades del entorno, sin banalizar por qué comenzamos a incorporar este elemento en nuestras vidas, el barbijo llegó para quedarse.

¿Se convertirá el tapabocas en un nuevo complemento de moda?. Parece que sí y los diseñadores captaron esa idea para tener en sus colecciones los modelos que den gusto llevar por la calle. Y es que si la mitad de la cara va a estar tapada, al menos que sea por algo que nos guste.

Eso sí, no hay que olvidarse de la calidad de los tejidos: cuantas más capas tenga el barbijo, más protegido se está. Y si son reutilizables se le hace un favor enorme a la ecología.

 

Las noticias locales nunca fueron tan importantes
SUSCRIBITE

Multimedia

Diseños con telas africanas. Un shock de color para el invierno

Hay que cuidarse, pero es válido sentir que se lleva algo lindo en la cara

ESTA NOTA ES EXCLUSIVA PARA SUSCRIPTORES

HA ALCANZADO EL LIMITE DE NOTAS GRATUITAS

Para disfrutar este artículo, análisis y más,
por favor, suscríbase a uno de nuestros planes digitales

¿Ya tiene suscripción? Ingresar

Básico Promocional

$120/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $1870

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Suscribirme

Full Promocional

$160/mes

*LOS PRIMEROS 3 MESES, LUEGO $2880

Acceso ilimitado a www.eldia.com

Acceso a la versión PDF

Beneficios Club El Día

Suscribirme
Ir al Inicio
cargando...
Básico Promocional
Acceso ilimitado a www.eldia.com
$120.-

POR MES*

*Costo por 3 meses. Luego $1870.-/mes
Mustang Cloud - CMS para portales de noticias

Para ver nuestro sitio correctamente gire la pantalla